Como parte de los Libros del saber de astronomía, Alfonso X encargó a dos toledanos -Samuel el Leví e Isaac Ibn Sid- la elaboración de cinco libros que describiesen la construcción y el uso de los relojes. Los conocimientos de los que hacen uso los autores eran pobiblemente los más avanzados en la época; las fuentes son andalusís, que en buena parte transmiten los principios del griego Herón de Alenjandría. Sus nombres son el Libro del relogio de la piedra de la sombra (que describe un reloj de sol), del agua, del argento vivo (en su principio base una clepsidra que usa mercurio, entonces llamado plata viva), de la candela (hace uso del consumo de una vela) y del palacio de las oras (nuevamente en esencia un reloj de sol, pero del tamaño de un edificio por cuyas doce ventanas va entrando sucesivamente la luz). De este último incluimos un fragmento:
CAPITULO V.
De cuerno se deve complir et acavar el palacio.
Si esto quissieres fazer, faz unos pedazos de madero que entren en la forma del cerco de los zontes, et ponlos entrell un demostrador et ell otro, fata que se cumpla el palacio, que sea semeíanca de torre redonda, et faz en la torre una puerta de la parte de septentrion, et faz sobre la torre so teíado. Et depues toma una sierra muy delgada, et assierra el demostrador de la ora primera de las oras de la cabeza de Capricornio sobre la linna que auies sennalado en aquel demostrador, fata que taíes todo el demostrador, et assí farás con todos los demostradores. Et assierra otrossí lo que cae entrell un demostrador et ell otro sobre aquella desviadura mesma en que taíaste el demostrador que es acerca della, et assí asserrarás lo que es entrell un demostrador et ell otro, fata que se acaven todos, salvo ende que no as de asserrar el demostrador que es en mediol dia. Et sabe que esta asserradura a de venir á manera de figura de cerco. Et esto mesmo farás con los demostradores de la cabeza de cáncer, et verná su serradura en figura de taíadura de pinnonado. Et síguesse su figura. Reloj del palacio de las horas